El compromiso de la Mutualidad de la Abogacía con la sostenibilidad económica, social y medioambiental es un elemento clave dentro de su estrategia. En este sentido, ¿cuáles son las principales líneas de actuación de la entidad en materia de RSC?
La estrategia de Responsabilidad Social Corporativa de la Mutualidad de la Abogacía se plantea desde los valores y principios del mutualismo, tales como la solidaridad, la confianza o la transparencia. Nuestro plan de RSC se sustenta sobre la implementación de buenas prácticas en la gobernanza, el fomento del negocio y la inversión responsable, el impacto social de nuestra entidad y nuestro compromiso con el medioambiente. Además, en este plan de actuación hemos integrado como objetivos indispensables el cumplimiento de los Diez Principios del Pacto Mundial, basados en derechos humanos, normas laborales, medioambiente y anticorrupción, así como de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.
¿Cuáles son los retos de la Mutualidad en el ámbito de la Responsabilidad Social Corporativa?
El principal reto al que nos enfrentamos como organización es lograr que la RSC trascienda a
todos los niveles de gestión y a todas las unidades de negocio de la Mutualidad.
Una vez logrado, nos ayudará a identificar nuevos horizontes para establecer una estrategia que
garantice la sostenibilidad de la empresa en el largo plazo.
Nuestra ambición consiste en que el plan de RSC evolucione y crezca con la propia entidad, así
como con las demandas de nuestros grupos de interés y de la sociedad en su conjunto.
En lo que respecta a la RSC en el ámbito económico, nuestro objetivo es seguir apostando por los
activos ESG, otorgándoles cada vez más peso en nuestra cartera de inversiones. Y, en cuanto al
aspecto social, estamos enfocados en la atracción del talento y en lograr la plena
transformación digital de la entidad como herramienta clave para llegar mejor a todos nuestros
públicos y cubrir sus expectativas.
La Fundación Mutualidad Abogacía avanza, consolidándose como una iniciativa de gran valor dentro del plan de RSC de la compañía. ¿Qué aspectos y novedades de la Fundación destacaría?
Durante 2019 hemos establecido los pilares de una nueva y retadora etapa de la Fundación
Mutualidad Abogacía, cuya presidencia también lidero.
La Fundación tiene unos propósitos muy asentados: ayudar a mutualistas y otros beneficiarios a
mejorar su capacidad de ahorro, desarrollarse como abogados y emprendedores,
a tener una mayor sensibilidad hacia los retos sociales y medioambientales y, por último, a
estar mejor preparados para afrontar la transición hacia la jubilación en
las mejores condiciones de salud y dignidad.
De entre todas las acciones que desde la Fundación hemos desarrollado en 2019, me gustaría
destacar la creación de una iniciativa
pionera: la Escuela de Pensamiento. Un espacio solidario de opinión y reflexión independiente e
intergeneracional que investiga las realidades del envejecimiento. Estoy seguro
de que este proyecto, fruto, una vez más, de la colaboración entre la Mutualidad y la Fundación,
va a aportar un gran valor a nuestros principales grupos de interés y al
conjunto de la sociedad.
Nuestro plan de RSC integra como objetivos indispensables el cumplimiento de los Diez Principios del Pacto Mundial, basados en derechos humanos, normas laborales, medioambiente y anticorrupción, así como de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.